Capellán consejero del presidente chileno alaba a Dios por el rescate milagroso en la mina San José

16 10 2010

Alfred Cooper capellán consejero del presidente de Chile, Sebastián Piñera, alaba a Dios por el rescate milagroso en la mina San José

Dios responde a las oraciones. Este es el mensaje de Alfred Cooper, capellán protestante del presidente de Chile en una entrevista en la BBC sobre el rescate de los 33 mineros en Chile, ocurrida el 14 de Octubre de 2010.

Hablando sobre el impacto espiritual que han vivido los mineros atrapados en lo profundo de la tierra en un desierto chileno, el reverendo Alfred Cooper describió como todos los mineros han declarado que Jesús estuvo allí con ellos en todo momento.

Hablando a la Radio BBC “Five Live Drive”, el reverendo Cooper dijo que estaba claro para los “científicos, políticos, y presidentes” que Dios responde a la oración.

Esta es la transcripción de la entrevista:

Peter Allen: “Hay un hombre con quien pude hablar un poco antes. Es el reverendo Alfred Cooper. Seré absolutamente honesto contigo, oímos una voz hablando en inglés un poco más allá en la cola y en efecto este hombre aparentemente había aparecido para darle las gracias a la prensa británica por su apoyo a lo largo de estos días y al oír su voz en inglés le pusieron frente al micrófono. El reverendo Alfred Cooper es actualmente el capellán consejero del presidente del país y me contó como se involucró desde el principio una vez ocurrido el colapso de la mina.”

Rev. Cooper: “Soy capellán en el palacio presidencial así que rápidamente organizamos una reunión de oración de emergencia y lo hicimos de todo corazón, pensando en los 33 mineros atrapados un kilómetro bajo tierra, sin saber si estarían vivos y sin conocer lo que estaría pasando por sus mentes. Durante 17 días estuvimos orando y entonces sucedió el milagro, cuando la perforadora rebotó en una roca y dio con ellos – penetrando en la caverna donde se encontraban – y por supuesto, irrumpimos en alabanza. El segundo culto convocado por el presidente fue una reunión de Alabanza, así que celebramos un culto de acción de gracias y luego, obviamente, hemos permanecido continuamente en oración. Y esto ha sido uno de los factores interesantes a resaltar para gente como nosotros. Muchos de los mineros bajaron a la mina siendo ateos, no creyentes o semi-creyentes, pero hasta el último de los 33 hombres que han subido, dan fe de que allí abajo no había 33 sino 34 – que Jesús estuvo allí con ellos y que tuvieron un sentido continuo de Su presencia y Su dirección.”

Peter Allen: “Si verdaderamente cree que fue una intervención divina lo que les rescató, entonces presumiblemente, también creerá que fue la intervención divina lo que les sepultó allí abajo inicialmente. Quiero decir que no siempre tiene sentido este tipo de argumento, ¿verdad?”

Rev. Cooper: “Bueno, lo cierto es que en este mundo caído eso es exactamente lo que ocurre. El hombre está sujeto a la posibilidad de tener accidentes y todo tipo de problemas, casi siempre, por su propia negligencia, y así sucedió en este caso en la mina. Cuando uno se preocupa por la seguridad de las personas, ocurren cosas así.  Y claro, en estas circunstancias, como en el caso de Jonás y la ballena, sabes que la gente tiende a clamar a Dios y esto es lo que ocurrió. Y Dios ha respondido.

Peter Allen: “Así que ¿cree que Dios escuchó sus oraciones? ¿Qué Dios escuchó las oraciones de ellos? ¿De verdad cree que fueron rescatados por la intervención divina? Rev. Cooper: “Pues por supuesto, vemos la mano de todos estos magníficos expertos volcados en resolver la situación, y la buena voluntad de tantas personas a nivel internacional, la brillante cobertura de los medios de comunicación y nosotros diríamos que todo esto ha obrado para bien, y que ciertamente mientras orábamos por esta situación, Dios ha guiado a todos de una forma extraordinaria, incluso a los científicos. Yo estaba con la gente de la NASA que llegaron el otro día. Y para mi sorpresa – todos hasta el último de estos científicos eran creyentes – y todos ellos dijeron: ‘Esto es un milagro. No hay otra palabra para describir lo que ha ocurrido aquí’.”

Peter Allen: “De acuerdo”

Rev. Cooper: Así que, quiero decir que – científicos, politicos, presidentes – todos hemos coincidido en este feliz momento en un misma idea, ‘¡Dios mío! Dios está allí y Él responde a la oración.’ Esto es lo que sentimos. Y ciertamente los mineros están dando fe de ello a todo el mundo – y también sobre otras cosas, pero esto parece ser realmente el factor principal.”

Peter Allen: “Esa es la perspectiva religiosa del Reverendo Alfredo Cooper. Son las 5:15 de la tarde.





Verdaderamente hay poder en la oración?

22 05 2010

“…A SUS ÁNGELES MANDARÁ ACERCA DE TI, QUE TE GUARDEN EN TODOS TUS CAMINOS.” (Salmo 91:11)

Si alguna vez te has preguntado si hay poder en la oración, lee atentamente este hecho real: Cada dos semanas un médico misionero iba a la ciudad a comprar medicinas para el hospital de campaña en el que prestaba sus servicios, en una aldea de la selva africana. En uno de esos viajes de varios días camino de la ciudad, vio a dos hombres peleándose al borde de la carretera y se detuvo. Uno de los hombres había quedado herido de gravedad y el misionero lo atendió, curando sus heridas y compartiendo el amor de Dios con él. De regreso a casa pasó la noche en la selva, donde acampó. En su siguiente visita a la ciudad, dos semanas más tarde, se le acercó un hombre, el mismo al que había ayudado en su viaje anterior. El hombre le dijo: ‘Sabía que llevabas dinero y medicinas contigo, así que mi banda te siguió al lugar donde acampaste, con la idea de matarte y quitarte el dinero y los medicamentos. Pero cuando estábamos a punto de atacar, vimos a veintiséis hombres armados que te rodeaban y protegían, y salimos huyendo.’ El misionero respondió: ‘Eso es imposible, yo viajaba solo.’ El hombre añadió: ‘Mis compañeros también los vieron. Y los contamos. Eran veintiséis hombres y estaban armados hasta los dientes.’

Unos meses después, de vuelta a su país, el misionero estaba compartiendo esta experiencia de cómo el Señor le había librado, con los hermanos de la iglesia que le envió al campo misionero, cuando un hermano puesto en pie le interrumpió diciendo: ‘¿Qué día exactamente ocurrió eso? Cuando el misionero le confirmó la fecha, el hombre se quedó maravillado. Y dijo: ‘Ese día, mientras aún era de noche en África y aquí de día, sentí una urgencia extraña de orar por tí. Era tan fuerte el sentir que llamé a varias personas para que vinieran a la iglesia a unirse conmigo en oración. Por favor, ¿pueden levantarse todos los que oraron conmigo aquella mañana? El misionero los contó uno por uno: había veintiséis personas, el número exacto de los guardas armados que vieron los maleantes de la banda. Esto es una historia real, tan real como el poder que tiene la oración. Ora en este momento e intercede port us hermanos que sirven al Señor.

“…A sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos.” (Salmo 91:11).





Intercesores orad!

22 05 2010

La oración es abrir el corazón o el alma a Dios en una forma sincera, sensible y afectuosa, por medio de Cristo, con la ayuda y en el poder del Espíritu Santo, para cosas como las que Dios ha prometido, o que son conforme a la Palabra de Dios, para el bien de la Iglesia, sometiéndonos en fe a la voluntad de Dios.

La verdadera oración se somete a la voluntad de Dios y dice: «Hágase tu voluntad» (Mt. 6:10). Por lo tanto, se espera que el pueblo del Señor, junto con sus oraciones y todo lo que tiene, se ponga con humildad a los pies de su Dios para que Él disponga de todo ello como mejor considere conforme a su sabiduría celestial. De modo que cuando ponemos todo nuestro ser a su disposición, no dudamos que Él responderá a nuestras oraciones en una forma que será la mejor para nuestro beneficio y para su gloria. En conse- cuencia, cuando los santos de Dios oran con sumisión a la voluntad de Dios, no discuten o dudan o cuestionan, sino que confían en fe en el amor de Dios y en su bondad para con ellos. Reconocen que

47ellos no siempre son sabios y que Satanás puede estar aerovechán- dose de ellos, para orar por aquellas cosas que, si las consiguen, nunca serían para la gloria de Dios ni para el bien ni el beneficio de su pueblo.

Juan escribió en su carta: «Y esta es la confianza que tene- mos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye. Y si sabemos que él nos oye en cualquiera ca Sil que pida- mos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho» (1 [n. 5:14, 15). Porque como ya he dicho antes, la petición gue no es presentada ante Dios en el Espíritu Santo y por medio de El no será respondida, porque está fuera de la voluntad de Dios. I’orque solo el Espíritu sabe cómo orar conforme a la voluntad de Dios.

‘Antes bien, como está escrito: Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, ni han subido en corazón de hombre, son las que Dios ha preparado para los que le aman. Pero Dios nos las (eveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios. Porque ¿quién de Jos hombres sabe las cosas del hombre, sino el espíritu del hombre que está en él? Así tampoco nadie conoció las cosas de Dios, sino el Espíritu de Dios»

(1 Co. 2:9-1 1).

Pablo también escribió a los Romanos: «No sabemos que pedir» (Ro. 8:26, NVI). Fíjese bien en esto: «No sabemos qué pedir». Si no pensamos acerca de esto, o si no entendemos su significado en el espíritu y en la verdad, podemos idear, como Jeroboam hizo, otra forma de adoración, tanto en forma como en sustancia, dife- rente a la revelada en la Palabra de Dios.

«Y [eroboarn dijo (’11 su corazón: Ahora se volverá el reino a la casa de David, si este pueblo subiere a ofrecer sacrificios en la casa de jehová en jerusalén: porque el corazón de este pueblo se volved a su señor Roboam rey de [udá, y me matarán a mí y se volverán a Roboam rey de Judá. Y habiendo tenido consejo, hizo el rey do- becerros de oro, y dijo al pueblo: Hastantc habéis subido a Jerusalén; he aquí tus dioses, oh Israel, los cuales te hicieron subir de la tierra de Egipto. Y puso uno en Bet- el, y el otro en Dan. Y esto fue causa de pecado; porque el pueblo iba a adorar delante de uno hasta Dan»

(1 R. I2:26-30).

Mientras que usted está orando, Dios está exami- nando su corazón para ver de qué raíz y espíritu brotan sus oracio- nes. Juan escribió: «Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye» (1 Juan 5:14). Y Pablo también escribió: «Mas el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos» (Ro.8:27).Dios responde solo aque- llas peticiones que son conforme a su voluntad, y nada más. Sólo el E~9ixiJJJ.S a n t o 91JJ~dee n s e ñ a r n o s J . QJ:;)J: c.QD.fQnDJ~ ‘J. ~JJ.\IQJJJ.1:>J.aJi. F1 es el único ser capaz de escudriñar todas las cosas, incluso las cosas profundas de Dios. Sin el Espíritu Santo, aunque tuviéramos mil libros de oraciones, no sabríamos cómo deberíamos orar, especial- mente debido a que tenemos debilidades que nos incapacitan por completo para hacerlo conforme a su voluntad.

ORACIÓN

Ven Espíritu Santo, mora en mi corazón y alma, mente y espíritu. Revélame las cosas de la mente y de la voluntad de Dios con el fin de que pueda orar conforme a sus planes para mi y para su Iglesia. Cuíame mientras leo las Escrituras para que pueda ver las promesas que Dios tiene para mí y para su iglesia, y ensériamc a orar y a reclamar estas promesas en su nombre. Perdóname por mi poca fe, la cual falla demasiado a menudo en confiar en que tú estás de verdad obrando para mi beneficio y para mi bien por medio de Cristo Jesús. Amén.





¿QUÉ HACER SI AL ORAR NO TIENES FACILIDAD DE EXPRESIÓN?

30 11 2009

Algunos creyentes se sienten perturbados con su vida de oración, porque al orar no perciben en sí mismos la facilidad de expresión que otros poseen. Aquellos tienen un lenguaje fluido, y tienen cierta facilidad para terminar sus peticiones con expresiones emotivas y pertinentes. Pero este hermano no posee esa capacidad, y a duras penas puede expresar las peticiones de su corazón.

A menudo Satanás se aprovecha de tal cosa para abatirnos y de ese modo debilitar nuestra resolución de dedicarnos a orar. Tal vez él esté susurrando en tu interior: “Si al menos tuvieras el don que posee el hermano tal o cual para orar, entonces podrías dedicarte con más esmero a la oración; pero en tu caso particular deberías dejarle eso a los que pueden hacerlo mejor que tu”.

¿Qué debemos hacer cuando somos atacados de ese modo? Al igual que en el caso anterior, al menos ya sabemos lo que no debemos hacer: no debemos dejar de orar. Recuerda que Satanás está tratando de obstaculizar tu vida de oración; por tanto, una cosa que no debes hacer es dejarte arrastrar por sus insinuaciones. Orar es una necesidad para todo hijo de Dios, y también es un deber; si algo nos obstaculiza para impedirnos que cumplamos con nuestro deber de orar, no debemos atacar al deber, sino al obstáculo.

Pero, ¿cómo podemos defendernos de este ataque? ¿Cómo podemos vencer este obstáculo?

Recuerda que Dios no mira como mira el hombre:

Cuando Dios desechó a Saúl y encomendó a Samuel que buscase otro rey, el Señor le reveló que ese rey sería tomado de los hijos de Isaí. Samuel se dirigió a la casa de Isaí y pidió a Isaí que llamase a sus hijos.

Dios no le había revelado aún cuál de ellos sería, porque quería enseñar a Samuel una gran lección; y no sólo a Samuel, sino a nosotros también. Primero llegó Eliab, y desde que Samuel lo vio supuso que ése era el hombre a quien Dios había señalado: “De cierto delante de Jehová está su ungido” (1Sam. 16:6).

En su lógica humana Samuel pensó que este individuo reunía todas las cualidades necesarias para ser rey. Y esto ya de entrada nos muestra un grave error que Samuel estaba cometiendo, y que nosotros también cometemos a menudo: ¿En base a qué había llegado Samuel a semejante conclusión?

Únicamente en base a lo que veían sus ojos. Samuel no conocía el interior de este individuo, nunca antes lo había visto; él no sabía cuáles eran los hábitos de vida de este hombre, ni cómo reaccionaba ante las crisis de la vida.

¿Cuál fue el veredicto de Dios en este caso? “Y Jehová respondió a Samuel: no mires a su parecer, ni a lo grande de su estatura, porque yo lo desecho; porque Jehová no mira lo que mira el hombre; pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón” (1Sam. 16:7).

Este ejemplo es muy ilustrativo en cuanto al tema que estamos tratando. El Señor no está escuchando la hermosura del lenguaje de los que oran; Él está observando la sinceridad del corazón. La falta de frases hermosas en la oración lo único que muestran es que no posees facilidad de expresión (o al menos, la facilidad de expresión que otros poseen); pero si vas a tener un defecto es mejor que sea en tu lenguaje y no en tu corazón.

¿Qué es mejor, tener un cuerpo sano en una ropa llana y sencilla, o tener un cuerpo enfermo envuelto en los más finos y caros vestidos? Como bien señala Gurnall: “¿Acaso no prefieres ser sincero con una pobre capacidad de expresión, que tener un corazón podrido con una excelente don de oratoria?”.

Recuerda que Dios no acepta nuestras oraciones por la forma en que nos expresemos, sino por la obra de Cristo:

Santiago dice que “la oración del justo puede mucho” (Sant. 5:16). La oración de este hombre es eficaz porque procede de un alma que ha sido justificada delante de Dios. “Los ojos de Jehová están sobre los justos, y atentos sus oídos al clamor de ellos… Claman los justos, y Jehová oye, y los libra de todas sus angustias” (Sal. 34:15, 17).

El Señor oye a los justos. Pero ¿cómo puede un hombre pecador llegar a ser considerado “justo” delante de Dios? A través de la obra redentora de Cristo. Es por medio de Cristo que nuestras oraciones llegan delante del trono de Dios; y todo creyente, el que habla bien como el que no posee facilidad de expresión, cuenta con ese recurso en su vida de oración (comp. 1P. 2:4-5).

Si no fuera por el ministerio intercesor de Cristo, nada de lo que hacemos para Dios sería aceptable en Su presencia. Pero cuando vayas a orar, deja que esta verdad te sirva de estímulo: tú tienes un Sacerdote que está intercediendo por ti todo el tiempo. Por medio de Él tenemos libertad para entrar en el Lugar Santísimo cuantas veces queramos y cuantas veces lo necesitemos (He. 10:19-22).

Esto no quiere decir que no existan ciertos vicios en las oraciones de algunos con los cuales debemos luchar; o que no debemos esforzarnos por aprender a usar argumentos bíblicos en nuestras oraciones, o por integrar en nuestras conversaciones con Dios el lenguaje que Dios mismo usa en las Escrituras.

Cuando vamos delante del trono de Dios en oración debemos hacerlo con la conciencia de la solemnidad del deber que será realizado. Nuestras palabras no deben salir atropelladamente de nuestros labios. Debemos orar ordenadamente y con un propósito definido. Pero siempre encontraremos algunos que nos exceden en sus oraciones. Por más que nos esforcemos en mejorar nuestra expresión, nuestra capacidad tiene un límite.

Pero no olvides que es por medio de Cristo que nuestras oraciones son escuchadas. Es por causa de Él que el cetro de la misericordia está extendido para nosotros en todo tiempo.

Y cuando un santo se dispone a orar la sangre de Cristo purifica sus oración de imperfecciones; lo que Dios escucha no es la hermosura de las expresiones usadas, sino la sinceridad de ese corazón que ha sido purificado por la sangre de Cristo, el sentido de necesidad de esa alma que ora, su asombro al meditar en la grandeza de Dios, su gratitud al considerar los dones inmerecidos que recibimos diariamente de Su mano; eso es lo que Dios escucha y lo que Dios observa cuando oramos.

© Por Sugel Michelén

PETICIONES DE ORACIÓN: oracion@elhogarcristiano.org

ARTÍCULOS SOBRE LA ORACIÓN:

http://todopensamientocautivo.blogspot.com/2009/10/articulos-sobre-la-oracion.html





TESTIMONIOS Y MÁS…

30 11 2009

Encontrarás testimonios en el siguiente enlace: http://logosmasespiritu.blogspot.com/search/label/Testimonios

Entra también en este enlace para ver libros de John Stott: http://logosmasespiritu.blogspot.com/search/label/Testimonios





CUANDO SIENTAS ANSIEDAD O ANGUSTIA, ACÉRCATE A DIOS

20 10 2009

el_justo_181009CUANDO SIENTAS ANSIEDAD O ANGUSTIA, ACÉRCATE A DIOS

“POR NADA ESTÉIS ANGUSTIADOS…” (Filipenses 4:6) ¿Te sientes angustiado hoy?. Entonces lee y medita en estas promesas de parte de Dios para tí. O aún mejor, llévatelas contigo y léelas a menudo: 1) “Esforzaos y animaos; no temáis ni tengáis miedo… con nosotros está el Señor… para ayudarnos…” (2 Crónicas 32:7-8). 2) “…Yo te libraré, dice el Señor, y no serás entregado en manos de aquellos a quienes tú temes” (Jeremías 39:17). 3) “…No temas porque yo te redimí, y te puse un nombre nuevo… cuando pases por las aguas… no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás…” (Isaías 43:1-2). 4) “…No temáis ni os amedrentéis…porque no es vuestra la guerra, sino de Dios” (2 Crónicas 20:15). 5) “…En el mundo tendréis aflicción, pero confiad, yo he vencido al mundo” (Juan 16:33). 6) “En paz me acostaré y asimismo dormiré, porque sólo tú, Señor, me haces vivir confiado.” 7) “Claman los justos, y el Señor oye y los libra de todas sus angustias” (Salmo 34:17). 8) “Tendrás confianza, porque hay esperanza; mirarás alrededor y dormirás seguro” (Job 11:18). 9) “…Pelearán contra ti, pero no te vencerán, porque yo estoy contigo para guardarte y para defenderte…” (Jeremías 15.20). 10) “…Ni principados ni potestades, ni lo presente ni lo por venir… ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios…” (Romanos 8:38-39). 11) “En ti confiarán los que conocen tu nombre… Tú… no desamparaste a los que te buscaron.” (Salmo 9:10). 12) “El Señor es tu guardador… es tu sombra a tu mano derecha… te guardará de todo mal, guardará tu alma… guardará tu salida y tu entrada…” (Salmo 121:5-8).

Escríbenos a:  oracion@elhogarcristiano.org

Mira este video: http://www.youtube.com/watch?v=kVX0GtLxRjE





CURSOS, MANUALES Y LIBROS DE ORACIÓN

12 10 2009

MANUAL DE ORACIÓN: «La oración mueve montañas»

http://www.heraldosdelapalabra.org/liderazgo/pdf/Manual_Ora_Mueve_Mont-Rev051507-A.pdf

LA ORACIÓN – WATCHMAN NEE

http://www.mediafire.com/download.php?09ebte2ybgy

MANUAL COMPLETO DE LA ORACIÓN

http://amen-amen.net/oracion/

Escríbenos a:  oracion@elhogarcristiano.org





HOMBRES DE ORACIÓN

12 10 2009

Biografías de Hombres de Oración.

Jerónimo Savonarola, 1452-1498, Florencia, Italia

Cuando era niño, tenía la costumbre de orar. A medida que fue creciendo, su fervor en la oración y el ayuno aumentaba. Pasaba muchas horas seguidas orando. Dios le hablaba en visiones. La oración era su mayor consuelo. Decidió vivir en un monasterio, donde se dedicó con más ánimo en la oración. En una visión Dios le ordenó que predicara todas las calamidades que sobrevendrían a la Iglesia. Así lo hizo. Su fervor por la oración aumentaba día por día, así como su fe. Frecuentemente, cuando oraba, caía en éxtasis. Pasaba noches enteras orando. En todas partes donde predicaba, sus sermones contra el pecado producian profundo terror. Sintiendo la inminencia del Juicio de Dios, predicaba contra el vicio, el crimen y la corrupción desenfrenada de la religión católica. Por predicar contra el pecado, fue amenazado, excomulgado y finalmente, mandado a ahorcar por orden de las autoridades católica. Jerónimo es considerado el Precursor de la Gran Reforma.

Martín Lutero, 1483-1546, Eisleben, Alemania

Cuando Martín tuvo uso de razón, su padre le enseño a arrodillarse al lado de su cama, por las noches antes de acostarse, rogandole a Dios que el pequeño recordara el nombre de su Creador. Sus padres lo enviaron a estudiar. Acostumbraba decir que “orar bien es la mejor parte de los estudios”. Un colega después escribió de Martín que cada mañana él comenzaba su día con una visita a su congregación y una oración a Dios. Después de experimentar una noche de rayos y truenos, Martín prometió hacerse monje católico si se salvaba. Dedicó su vida en el monasterio al estudio de la Palabra. Al descubrir por gracia de Dios que “los justos por la fe vivirán”, la oración tomó otro sentido. No fue más un ejercicio sin sentido, sino una comunión con Dios. El escudriñar la Palabra y la oración lo llevó a escribir sus 95 tesis los cuales clavó en la puerta del Castillo de Wittenberg, argumentando que Cristo deseaba el arrepentimiento y la tristeza por el pecado. Esto causó que fuera excomulgado de la religión católica. Al ser llamado a enfrentar a una gran asamblea de autoridades religiosas y civiles, inclusive el Papa, paso la noche anterior en vigilia, postrado con el rostro en la tierra, llorando y rogandole a Dios. Uno de sus amigos lo escuchó orar así: “…Te pido que estés junto a mí contra la razón y la sabiduría del mundo. No es mi causa sino la tuya. ¿Qué tengo yo con los grandes de la tierra? Es tu causa, Señor, tu justa y eterna causa … ven, estoy dispuesto a dar, como un cordero, mi propia vida. El mundo no conseguirá atar mi conciencia, aun cuando esté lleno de demonios; y si mi cuerpo tiene que ser destruido, mi alma te pertenece, y estatá contigo eternamente…”. A pesar que fue excomulgado y fue considerado un criminal, Dios lo protegió. Fue escondido y durante tres meses tradujo en su totalidad el Nuevo Testamento en alemán. En su vida familiar, Martín y su familia oraban hasta sentir la presencia de Dios entre ellos. Martín tenía por costumbre orar durante horas enteras. Decía que si no pasaba dos horas orando por la mañana, se exponía a que Satanás ganase la victoria sobre él durante ese día. Alguien dijo de él: “El tiempo que él pasa orando produce el tiempo para todo lo que hace”. Al sufrir un ataque al corazón, antes de morir, clamo al Señor: “Voy a entregar mi espíritu … ¡Oh, mi Padre Celestial! Dios mío, Padre de nuestro Señor Jesucristo, en quien creo, a quien prediqué y a quien confesé, amé y alabé…”. Martín es considerado el Gran Reformador.

John Bunyan, 1628-1688, Bedford, Inglaterra

John nació en el seno de una familia sin recursos económicos. Llego a ser un hojalatero y muy pobre. Se casó con una mujer creyente y también pobre. En el proceso de convertirse, oró al Señor así: “Oh Señor, no sé juzgar entre el error y la verdad. Señor, no me dejes solo en esto de aceptar o rechazar esta doctrina ciegamente; si es de Dios, no me dejes despreciarla”. El dijó en ese período de su vida, “Oh Señor, muéstrame, te lo ruego, que me amas con amor eterno”. Entonces escuché -cuenta John- repetidas mis palabras, como en un eco: “Yo te amo con amor eterno”. Al día siguiente, inundado de paz, el Señor le aseguró en oración: “Te amé cuando vivías pecando; te amé antes, te amo después y te amaré siempre”. Cierta mañana, relata John: “…mientras yo oraba temblando porque pensaba que no obtendría una palabra de Dios para consolarme, Él me dio esta frase: “Te basta mi gracia”. El anhelo del corazón de John era predicar una palabra que Dios pudiese usar para despertar la conciencia de la gente. Él escribió: “Desde lo más produndo de mi corazón clamé a Dios insistentemente para que Él hiciese eficaz la Palabra para la salvación del alma…”. John enfrentó oposición del enemigo por predicar la Palabra. Fue acusado de no observar los reglamentos de los cultos de la religión católica y fue sentenciado a la carcel hasta el día que jurase que no volvería a predicar. Él se negó a renunciar y permaneció en la carcel por más de doce años. John escribió que antes de caer en la carcel, fue “…guiado a orar, a pedirle a Dios que me fortaleciese con todo poder, conforme a la potencia de su gloria, para toda paciencia y longanimidad, con gozo dando gracias al Padre.” En la carcel, escribió el libro “El Peregrino”. Con respecto a la oración, John dijo: “Hay en la oración, el momento de dejar al descubierto la propia persona, de abrir el corazón delante de Dios, de derramar el alma afectuosamente en peticiones, suspiros y gemidos”. En otra ocasión escribió: “A veces las mejores oraciones consisten más en gemidos que en palabras, y esas palabras no son más que la mera representación del corazón, vida y espíritu de tales oraciones”. John insistia e importunada a Dios en sus oraciones; el escribió: “Yo te digo: continúa tocando, llorando, gimiendo y suplicando; si Él no se levanta para atenderte, por ser tú su amigo, al menos debido a tu insistencia Él se levantará para darte todo lo que necesites”. John es considerado el Soñador Inmortal.





REUNIÓN DE ORACIÓN EHC

7 05 2009

grupo-oracion

PETICIONES DE ORACIÓN

Puedes hacernos llegar tus peticiones al ministerio de intercesión de la iglesia El Hogar Cristiano: oficina@elhogarcristiano.org

Nos reunimos los VIERNES a las 8pm en el local de la iglesia El Hogar Cristiano, sita en Alcalá de Henares (Madrid)  Calle Varsovia, 6.

Si te animas a unirte a nuestra reunión de oración, ¡SERÁS BIENVENIDO!





Es de hace unos años pero parece como para hoy…

7 05 2009

TRANSFUSIÓN TOTAL

Es  la  tarde  de un viernes típico y estás conduciendo camino de tu casa. Sintonizas la radio. Las noticias cuentan una historia de poca importancia, acerca de un pueblito de la  India  donde  alguna  gente  se  ha  muerto de repente, por motivo desconocido,  de  una  gripe desconocida. Es algo interesante y algunos doctores van allá  para investigarlo. No lo piensas mucho, pero el domingo, al regresar  a  tu casa de la iglesia, oyes otra noticia en la radio. Ahora dicen que  no  son tres personas sino 30.000 personas en las colinas remotas de esta área  de  la  India,  y  ya sale  en el Telediario de esa noche. Personal del Control de Enfermedades de Estados Unidos van para allá para investigarlo, porque es una enfermedad muy extraña y misteriosa.

im154-1El lunes cuando te despiertas, la noticia es más importante, y aparece en primera plana del periódico. Porque no sólo es la India, sino Pakistán, Afganistán e Irán, y pronto la noticia está saliendo en todos los canales de televisión. Le están llamando «la Influencia misteriosa». Los presidentes de los gobiernos se ponen de acuerdo para informar a la población, pero todos se están preguntando, «¿Cómo vamos  a controlarlo?».

Entonces una declaración sorprende a toda Europa: algunos países están cerrando sus fronteras. No  habrá más vuelos de Francia a India, Pakistán  o  cualquier  otro  país donde se haya visto la enfermedad. Por lo del cierre  de  la  frontera,  estás  viendo  las  noticias  en  la noche antes de acostarte y no lo puedes creer cuando ves a una mujer llorando en  Francia  diciendo:  «¡Hay  un hombre en un hospital de París muriendo de la influencia misteriosa!.» Ya ha  llegado a Europa. Hay pánico. La información más fiable dice que cuando tienes esta gripe, te dura una semana y ni cuenta te das. Luego tienes  cuatro días de síntomas horribles y después mueres. Inglaterra ha cerrado  sus  fronteras, pero es demasiado tarde, ya se han presentado casos en  South Hampton,  Liverpool y Londres.

El martes por la mañana el  presidente  de  Estados  Unidos  declara:  Debido  al riesgo a la seguridad nacional, todos los vuelos hacia o desde Europa y Asia han sido cancelados, si tienen  seres  queridos en el extranjero, lo siento,  no pueden regresar hasta que encontremos una cura  para  la  enfermedad». En los días siguientes hay pánico en todo el mundo. Todos tienen miedo. Los que se atreven a ir por la calle van con mascarillas. La gente trata de vivir su vida diaria con normalidad y se pregunta que harán si llega la enfermedad a su país.

El  miércoles  por la noche estás en la iglesia en un culto especial de oración, para interceder y rogar al Señor por una cura,  cuando alguien entra corriendo y dice, «Escuchad lo que dice la radio”, «dos mujeres  están  en  el  hospital  de  Nueva  York  muriendo de la influencia misteriosa»… la epidemia está invadiendo con rapidez todo el mundo. Italia, Portugal, México, Perú, Colombia, Venezuela, Argentina, Australia, China, España, Zaire, EL Congo…  Los científicos  están trabajando sin parar para encontrar un antídoto, pero nada está funcionando.

Y de repente, viene  la  noticia  que todos esperaban: se ha descifrado el código DNA del Virus. Se puede hacer la vacuna. Pero se necesita la sangre de alguien que no haya sido  infectado y, en todos los países, por los medios de comunicación, a todos se les pide con urgencia una sola cosa: «Que  vayan  al  hospital  central  de  la ciudad para que se les practique un análisis de sangre y esperen los resultados.» Vas de voluntario con tu familia  junto con otros vecinos, preguntándote y si esto puede ser el fin del mundo?…

  1. Está limpia y pura, y podemos proceder a fabricar la vacuna contra esta gripe horrible».  Los medios de comunicación apostados en el hospital ya conocen la noticia y empiezan a hacerse eco. La gente empieza a llorar, gritar, a dar gracias a Dios,… Pero en eso el doctor se te  acerca nuevamente a ti y a tu esposa y te dice, «¿Podemos hablar en privado un momento?, Es que no sabíamos que el donante sería un niño y necesitamos que firmen este formulario, es el permiso para usar su sangre».

Empiezas a leer el permiso y te das cuenta de que no han llenado la cantidad  de sangre que necesitan tomar: «Pues, ¿cu.. cu.. cuánta sangre hace falta para la vacuna?”. En ese momento la sonrisa del doctor  desapareció por completo  y contestó.  «No pensábamos que iba a ser un niño, No estábamos  preparados…  ¡La  necesitamos… TODA!”.

No lo puedes creer y tratas de contestar: «Pe… pe… pero… yo no puedo firmar esto!. Cómo voy a sentenciar a muerte a mi propio hijo!». El doctor te sigue insistiendo, «Pero usted no lo entiende?.  Estamos hablando de salvar a la población mundial. No tenemos mucho tiempo. Por  favor firme. Necesitamos la sangre de su hijo… y la necesitamos TODA».  Preguntas,  «y no hay otra posibilidad?, ¿no  le  pueden hacer una transfusión  de  sangre a mi pequeño?». El doctor responde: «Si tuviéramos sangre limpia claro que podríamos, pero es la única en todo el mundo!… No lo piense más, por favor, ¡firme!.

Con el alma en un puño, en silencio y sin poder sentir ni los mismos dedos que sujetan el bolígrafo, lo firmas… y te preguntan… «¿Quieren pasar un momento para despedirse de su hijo antes de que empecemos?…”. Arrastrando tu vida, caminas hacia la sala de urgencias donde tienen a tu hijo tendido en una camilla, «¡Papá!… ¡Mamá!… Tu corazón va a estallar de dolor. ¿Qué está pasando?. Puedes tomar su manita y decirle, «Hijo mío precioso, mamá y yo te queremos mucho, y nunca dejaríamos que te  pasara  algo que no fuera necesario, ¿Comprendes eso?». El doctor regresa  y  te  dice:  «Lo siento. Tenemos que empezar ya. Gente en todo el mundo está muriendo.»… Pero no quieres marcharte de su lado. ¿Cómo te puedes ir? ¿Puedes darle la espalda a tu hijo y dejarlo ahí sabiendo que morirá?… mientras él te dice: «¿Papá?… ¿Mamá?…  ¿Por qué me habéis abandonado?…”

logo20v2A la  semana siguiente, bien temprano, en una mañana fría y en presencia de los medios de comunicación de todo el mundo, las autoridades hacen una ceremonia para honrar a tu hijo. No fue mucha gente. Algunos lo ven por televisión, y dicen: cambia de canal, van a dar el funeral del niño ese. Pon algo más divertido. Otros se  quedaron  dormidos, regresaron muy tarde y estaban demasiado cansados como para levantarse de la cama, otros prefirieron ir al parque a tomar el sol, otros prefieren discutir sobre el partido  de  fútbol de la noche anterior, y otros vienen a  la ceremonia con una sonrisa falsa, fingiendo que les importa. Quisieras levantarte y gritar «MI HIJO MURIO POR TODOS VOSOTROS!!. ¿NO OS IMPORTA?» Tal vez eso es lo que Dios quiere decirte, «¡¡MI HIJO MURIO POR CADA UNO DE VOSOTROS!!… ¿NO SABÉIS CUANTO OS AMO?» Juan 3,16.

Es curioso lo simple que es para la gente desechar a Dios y después preguntarse porque el mundo va de mal en peor. Es curioso como nos creemos todo lo que dice la televisión o leemos en el periódico, pero cuestionamos lo que dice la Biblia. Es curioso como alguien dice Yo creo en Dios, pero con sus acciones lo niega, pisando el precioso nombre de Jesús. Es curioso como puedes enviar cientos de bromas a través de un correo electrónico…, y se esparcen como un fuego voraz, pero cuando envías mensajes acerca de Dios la gente se lo piensa dos veces antes de compartirlo con otros. Es curioso como la lujuria, cruda, vulgar y obscena pasa libremente a través del ciberespacio, pero la discusión pública acerca de Jesús es suprimida en las escuelas y en el lugar de trabajo. ¿ES CURIOSO, VERDAD?

Más curioso es ver como alguien puede estar tan encendido por Cristo el domingo, y ser un Cristiano invisible el resto de la semana. Es curioso que un mensaje como este, no lo enviarías a muchos de los que están en tu lista de correos electrónicos, y sin embargo, necesitan recibirlo. Porque no estás seguro de lo que vayan a pensar de ti. Es curioso, ¿como es posible que me preocupe más lo que la gente piense de mi, que lo que Dios pueda pensar de mi?…